María Rosa CASTRO
Facultad de Traducción e Interpretación

Francisca PADILLA
fpadilla@ugr.es

Pilar GONZALVO y María Teresa BAJO
Facultad de Psicología

 

Universidad de Granada

 

 

Evaluación del proceso de adquisición del conocimiento especializado:

el caso de los intermediarios de la comunicación

 

 

De acuerdo con Cabré (2001, 2002), las unidades terminológicas representan el conocimiento de los especialistas de un dominio particular. De hecho, sólo será posible un uso adecuado de los términos si se adquiere el conocimiento preciso y preestablecido por los expertos de cada materia. Sin embargo, no podemos limitar el conocimiento de un área a un mero listado de unidades léxicas, ya que éste, también engloba las relaciones entre dichas unidades. Dichas relaciones se plasman en los textos especializados con los que los intermediarios de la comunicación han de trabajar.

La correcta adquisición del conocimiento especializado y, de la terminología que lo representa, supone uno de los pilares fundamentales en el desarrollo de la actividad traductora. Por lo tanto, resulta imprescindible en la formación de los traductores el aprendizaje de las estrategias necesarias que les ayuden a alcanzar el grado de competencia cognitiva acorde con las exigencias de la labor que desarrollan. Creemos que para lograr este objetivo docente, es necesario abordar, desde una perspectiva empírica, un fenómeno tan complejo como es la adquisición, la organización y el intercambio del conocimiento.

En este sentido, el presente trabajo pretende:

El presente proyecto —en fase de desarrollo, pues los resultados finales no se obtendrán hasta el final del presente curso escolar— implica que los estudiantes de traducción completen tareas de extracción del conocimiento antes y después de la realización del proyecto terminológico que elaboran en la asignatura de terminología como parte de su formación práctica. Gracias a dichas tareas pueden construirse sus redes de conocimiento en el dominio antes y después de dicho trabajo de clase. Esto es posible gracias a las técnicas anteriormente citadas cuya validez ha sido ampliamente demostrada en la evaluación de la adquisición del conocimiento y, de los cambios en el mismo, en dominios muy diversos (Murphy, y Wright , 1984; Jonassen , 1993; Gonzalvo y col. 1994; McGaghie , 2000). En nuestro proyecto, las redes de los estudiantes de traducción se comparan con las de expertos en el dominio, además de con las de personas, que sin ser expertas, han recibido cursos estructurados de formación en las áreas en estudio. Las redes construidas permiten observar las relaciones entre los conceptos que se representan en forma de nodos y también nos posibilitan la evaluación de la complejidad de la red. Los análisis también nos permiten aislar las zonas de conocimiento de cada grupo de participantes en la evaluación, expertos en el dominio, no-expertos con formación estructurada y estudiantes de traducción. También pueden aislarse las zonas de conocimiento de cada individuo. El conocimiento del estudiante en traducción se evalúa por el grado de similitud entre su red y la red de los expertos y estas puntuaciones se valoran en relación con las notas obtenidas en el proyecto de terminología y, con una traducción, que se puntúa por dos expertos en traducción y dos expertos en el dominio.

Los resultados de esta investigación pueden ayudar al perfeccionamiento de la formación del futuro traductor, en la medida en que puede orientar la práctica docente, gracias a la evaluación empírica del conocimiento real adquirido en las primeras fases de la actividad traductora. En futuras investigaciones pretendemos ampliar el proyecto a otros intermediarios de la comunicación como son los intérpretes.

Referencias

•  Beals, R., Krantz, D.H. & Tversky, A. (1968). “Foundations of multidimensional scaling”. Psychological Review , 75, 127-142.
- Cabré, M.T., Doménech, Meritxell, Morel, Jordi y Rodríguez, Carlos (2001). “Las características del conocimiento especializado y la relación con el conocimiento general”. En de M. T. Cabré y J. Feliu (eds.) La terminología científico-técnica: reconocimiento, análisis y extracción de información formal y semántica (DGES PB96-0293) .
- Cabré, M.T. (2002). Análisis textual y terminología, actores de activación de la competencia cognitiva en la traducción. En Alcina, A. y Gamero, S . (eds.) La Traducción científico-técnica y la terminología en la sociedad de la información.
- Gonzalvo, P., Cañas, J.J, y Bajo, M.-T. (1994). “Structural representations in knowledge acquisition”. Journal of Eductional Psychology, 86, 601–616.
- Johnson, S.C. (1967). “Hierarchical clustering schemes”. Psychometrika , 241–254.
- Jonassen, D.H., Beissner, K., y Yacci, M. (1993). “ Structural knowledge: techniques for representing, conveying, and acquiring structural knowledge”. Hillsdale, NJ: Erlbaum.
- McGaghie, W.C., McCrimmon, D.R., Thompson, J.A., Ravitch, M.M., y Mitchell, G. (2000). “Medical and veterinary student's structural knowledge of pulmonary physiology concepts”. Academic Medicine, 75 (4), 362 – 368.
- Murphy, G.L. y Wright, J.C. (1984). “Changes in conceptual structure with expertise: differences between real-world experts and novice”. Journal of Experimental Psychology: Learning, Memory and Cognition, 10, 144-155.
- Schvaneveldt, R.W., Ed. (1990). Pathfinder associative networks: Studies in knowledge organization. Norwood, N.J.: Ablex.